sábado, 26 de noviembre de 2016

El pasado es un prólogo






                                SOBRE LA FUGACIDAD DE LAS COSAS


Siento su aliento en las mejillas todavía,
¿Cómo es posible que días tan recientes ya
transcurrieran del todo y para siempre?

Esto es algo que nadie imagina a fondo,
y demasiado atroz para lamentaciones,
todo se desliza y fluye ante uno mismo,

y mi propio Yo, por nada impedido,
se me escurrió desde que fuera niño,
como inquietante perro, extraño y mudo.

Luego: yo también estuve hace cien años,
y mis antepasados, que en su mortaja
conmigo están emparentados como mi propio pelo,

uno conmigo fueron como mi propio pelo.

HUGO VON HOFMANNSTHAL, Avant le jour.


   Entre el eclipse de la duración, la ruptura del lazo generacional y la sociedad del espectáculo la edad ha adquirido un extraño valor en nuestros tiempos modernos. La experiencia vivida parece a veces menos importante a ojos de nuestros contemporáneos que las experiencias que aún están por vivir... ¿ qué puede proponer al mundo un anciano como yo?...


                                    ECCE HOMO

¡Sí! ¡Sé de dónde procedo!
Insaciable como la llama,
quemo, abraso y me consumo.
Luz se vuelve cuanto toco
y carbón cuanto abandono.
¡Llama soy sin duda!
  
    FRIEDRICH NIETZSCHE.,El gay saber


Rechazar lo inaceptable

¿ Qué he aprendido, pues, que pueda formular y transmitir?. Ante todo, que es necesario y posible rechazar lo inaceptable. Los que durante décadas se habían doblegado, considerando que no había nada que hacer, tanto los oponentes incapaces de unirse antes de tomar el poder como los no resistentes tras la victoria de las fuerzas asesinas, los que habían renunciado, considerando el combate perdido de antemano, carecían de algo , algo que distingue al hombre en su dignidad.
  Ésta es la palabra que buscaba. Cuando en 1948 los redactores de la Declaración Universal de los Derechos Humanos intentaron caracterizar a la persona humana, el término que eligieron porque forma parte de todas las religiones y todas las filosofías es " dignidad".
 
           Todo los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos y, dotados como están de razón y conciencia, deben comportarse fraternalmente los unos con los otros.

  Lo inaceptable es que se atente contra la dignidad. Ese atentado a veces se enmascara con un rechazo del otro porque le falta algo, porque es demasiado diferente, demasiado incapaz, porque legalmente goza de menos privilegios. Pero legítimamente nadie puede ser jamás tratado como inferior. Ese tratamiento es inaceptable. Y es legítimo indignarse.
  Ahí es donde la indignación debe encontrar su vía y conducir a un verdadero compromiso. Si se queda en puro rechazo se debilita, se convierte en cólera, en rechinar de dientes. Encontrar qué es lo que merece indignación es la primera vocación que debo transmitir a quienes se enfrentarán con ese nuevo mundo tan gravemente amenazado.
     Es una cuestión de conciencia.


EL CIELO ESTRELLADO SOBRE MI CABEZA Y LA LEY MORAL EN EL FONDO DE MI CORAZÓN, O EL DESEO Y LA LEY*
* Kant


resistir es crear. Crear es resistir


STÉPHANE HESSEL. EN RESUMEN O CASI...