ya no me dice nada,
y nada tengo que decirle a ella.
La única palabra
que entiendo y que pronuncio
es ésta
que con todo mi amor hoy te dedico:
nada.
LEO POEMAS
Leo poemas al azar,
leo casi sin pensar en lo que leo.
Cuando me encuentro un verso triste,
siento en el alma como una caricia.
No es que me alivie la tristeza ajena,
es que me siento menos solo
Fascinación al leer este libro de poemas. Al final de toda una vida, después de haberla vivido toda, tras el todo queda nada,¿ nada por vivir quizás? Certera paradoja. Voy a releerlo, siento que necesito volver a estos poemas para recrear la soledad del poeta al final de su vida.
ResponderEliminar